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Las situaciones de estrés, ansiedad, cambios en nuestro estado de ánimo… nos afectan en distintos momentos de nuestra vida, nos producen sufrimiento
y, si no somos capaces de manejarlos, acudir a un psicólogo nos puede ayudar a reconducir nuestra situación. La decisión de pedir ayuda es tuya.
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La ansiedad es una respuesta emocional que genera
sentimiento de tensión, preocupación o nerviosismo
y que sentimos cuando nos encontramos frente a
tareas que consideramos difíciles o peligrosas.
Se convierte en un problema cuando aparece sin
motivo aparente o cuando su nivel o duración son
excesivos.
Los trastornos del estado de ánimo tienen como
principal característica una alteración del humor,
por ejemplo la depresión.
Tienen en común la presencia de síntomas físicos
que sugieren una enfermedad médica como por
ejemplo la hipocondría, la amnesia disociativa o
asumir el papel de enfermo.
Es en la adolescencia cuando se inician dos de
los principales trastornos alimenticios que son
la anorexia y la bulimia nerviosa.
Dificultad para resistirse a un impulso, una
motivación o una tentación a la hora de llevar a
cabo un acto perjudicial para la persona o para
los demás como por ejemplo el trastorno
explosivo intermitente o el juego patológico.
El abuso de sustancias u otras adicciones no
tóxicas pueden desarrollar comportamientos
caracterizados por una pérdida de control y una
enorme dificultad para abandonarlas, aún
sabiendo que esta acarrea graves consecuencias
negativas para sí mismo. Suelen generar
problemas tanto en el ámbito familiar como en
el laboral, social o sanitario.
91 445 5162
Las situaciones de estrés, ansiedad, cambios en nuestro
estado de ánimo… nos afectan en distintos momentos
de nuestra vida, nos producen sufrimiento y, si no
somos capaces de manejarlos, acudir a un psicólogo nos
puede ayudar a reconducir nuestra situación. La
decisión de pedir ayuda es tuya.
La ansiedad es una respuesta emocional que genera
sentimiento de tensión, preocupación o nerviosismo y
que sentimos cuando nos encontramos frente a tareas
que consideramos difíciles o peligrosas.
Se convierte en un problema cuando aparece sin motivo
aparente o cuando su nivel o duración son excesivos.
Los trastornos del estado de
ánimo tienen como principal
característica una alteración
del humor, por ejemplo la
depresión.
Tienen en común la presencia
de síntomas físicos que sugieren
una enfermedad médica como
por ejemplo la hipocondría, la
amnesia disociativa o asumir el
papel de enfermo.
Es en la adolescencia cuando se
inician dos de los principales
trastornos alimenticios que son
la anorexia y la bulimia
nerviosa.
Dificultad para resistirse a un impulso, una motivación
o una tentación a la hora de llevar a cabo un acto
perjudicial para la persona o para los demás como por
ejemplo el trastorno explosivo intermitente o el juego
patológico.
El abuso de sustancias u otras adicciones no tóxicas
pueden desarrollar comportamientos caracterizados
por una pérdida de control y una enorme dificultad
para abandonarlas, aún sabiendo que esta acarrea
graves consecuencias negativas para sí mismo. Suelen
generar problemas tanto en el ámbito familiar como
en el laboral, social o sanitario.
